Como madre primeriza de un pequeño de tan solo unos meses, me planteo como educar a mi hijo y que opción es la mejor. Esto de los métodos siempre me ha llamado la atención; soy educadora infantil y he estudiado muchas formas de educar. Para mi, todos los métodos tienen algo de bueno y lo mejor es coger de cada uno de ellos lo que más nos pueda interesar para la educación de nuestros hijos.
Para que te puedas hacer una idea de los métodos más interesantes que existen, iré publicando entradas con las ventajas e inconvenientes de cada uno de ellos y explicándote en que consisten. Hoy te traigo un método de moda pero que ya cuenta con varios años de existencia.
EL MÉTODO MONTESSORI
Según la Fundación Argentina del método Montessori, este método se caracteriza por «proveer un ambiente preparado: ordenado, estético, simple, real, donde cada elemento tiene su razón de ser en el desarrollo de los niños. El aula Montessori integra edades agrupadas en períodos de 3 años, lo que promueve naturalmente la socialización, el respeto y la solidaridad.»
El aula (o casa) estaría distribuida en distintas áreas temáticas y el niño es libre de escoger el área que más le apetezca en cada momento. De esta manera, se respeta una educación donde cada pequeño tiene su propio estilo y ritmo. El adulto se convierte así en una especie de guía, que ayuda sin molestar ni exigir. El niño se va adaptando a su nivel evolutivo y el adulto únicamente lo acompaña.
Este método cuenta con materiales diseñados específicamente (también se pueden preparar en casa) y se caracterizan porque el propio material indica al niño si se ha equivocado o no y permite modificar la acción. Los juegos de bloques son un buen ejemplo.
Aunque en este método el adulto es simplemente un guía, esto no quita que tenga que trabajar duro junto al pequeño. Es obligación del adulto observar al pequeño, descubrir sus intereses y capacidades y ofrecerle áreas adaptadas a su nivel evolutivo. Tal y como indican en la página antes mencionada: «La guía Montessori no imparte ni premios ni castigos, la satisfacción es interna y surge del trabajo personal del niño.« Esto crea confianza en el pequeño y disciplina para aprender por si solo.
Y hasta aquí la parte teórica del método explicada de forma muy sencilla. En siguientes entradas daré algunos ejemplos de áreas temáticas y como podemos preparar juegos en casa.
¿Que te parece este método? ¿Crees que esta forma de aprender favorece al pequeño o lo limita?
El blog del patio de vecinas 
Siempre escucho hablar de este método pero nunca termino de enterarme de que va. Me interesa mucho el tema así que por aquí me quedo!
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Bueno, tengo que decir que yo la teoría me la sé, pero aún no he puesto en marcha la práctica… ¡veremos a ver como se nos da! ¡Gracias por tu visita!
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Hola, me parece genial que hayan tocado este tema. Particularmente encuentro muchos aspectos positivos en el Método Montessori, pero también pocas instituciones – nidos que los lleven a la práctica al 100%, algunos por la infraestructura, otros por el personal, a ellos se suma el hecho que si bien la institución pudiera seguir esta filosofía, existe en muchos casos un cambio brusco con la realidad que encuentra el niño en casa, entonces la aplicación de este método no rinde todos los frutos que se desean.
Participo en un grupo de Facebook en donde el objetivo es excelente, promover el método Montessori, facilitar recursos, información, etc. Sin embargo la participación de los miembros está más orientada a mostrar a la comunidad los objetos que han adquirido para adoptar éste método, o cómo han acondicionado la habitación de sus niños… ejemplos que en más de una ocasión me han llevado a pensar que el método es más tomado como una moda. Los materiales y el ambiente son importantes, pero aun más lo es la participación del adulto, como guía y observador, brindando los escenarios y experiencias para que el niño sea protagonista de su propio aprendizaje y todo ello, como bien señalan, no es un trabajo fácil, demanda preparación, mucha información, habilidad y creatividad.
Un abrazo.
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¡Muchas gracias por tu comentario! Estás en lo cierto, el método es algo más que adquirir productos o acondicionar espacios. Desde mi punto de vista es más importante el papel del adulto como guía que el hecho de tener que estar comprando todo producto que salga (¡que hay un montón!). También el hecho de crear nuestros propios juguetes puede ser divertido… ¡Saludos!
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